Por el personal de PoliceOne
DALLAS, Texas. - Lo último que quiere oír un supervisor de policía tras un tiroteo en el que se ha visto implicado un agente es que "no hay imágenes de la cámara", declaró Jason Dombkowski en una reciente demostración del sistema de detección de disparos con cámara corporal BodyWorn de Utility Associates. Como antiguo jefe de policía de West Lafayette (Indiana), Dombkowski sabe lo problemático que puede resultar para las fuerzas del orden no grabar con una cámara corporal el uso de la fuerza.
Hay muchas razones legítimas por las que un agente puede no activar una cámara corporal durante un suceso de gran tensión, pero en el entorno actual, en el que el público espera transparencia policial, es probable que los ciudadanos lleguen a conclusiones erróneas de que un organismo tiene algo que ocultar si un agente no activó su cámara corporal. Los agentes de policía pueden incluso ser reprendidos por no pulsar "grabar", a pesar de que pueden haber estado en una situación de vida o muerte en la que la activación de su cámara corporal no era una preocupación inmediata.
Utility Associates no lo considera un problema de funcionarios, sino de tecnología. La empresa cree que la grabación automatizada es la solución.
En la demostración, el equipo de Utility presentó su concepto de "agente conectado", un ecosistema de dispositivos y programas informáticos que aprovechan la inteligencia artificial y el internet de las cosas para aumentar la seguridad de los agentes y preservar al mismo tiempo pruebas fundamentales para el enjuiciamiento y la transparencia policial. Una herramienta esencial para el agente conectado es la nueva cámara corporal de Utility con detección de disparos. Fácil de ocultar y asegurar en un chaleco táctico, el dispositivo hace más que capturar imágenes: proporciona información crítica que puede salvar una vida.
Cuando se detecta un disparo, ya sea del arma de un agente o de un sospechoso, la cámara corporal comienza a grabar automáticamente. La función de grabación inteligente previa al evento de la cámara captura los dos minutos anteriores de audio y vídeo, conservando información esencial sobre lo que ocurrió en los momentos previos a los disparos.
Cuando se detectan disparos, la cámara corporal envía una alerta a la central y a cualquier otro agente que se encuentre en un radio determinado. La cámara corporal de cualquier agente que se encuentre en la zona de alerta también empezará a grabar cuando se detecte un disparo.
La cámara corporal también transmite datos GPS y otra información crítica a AVaiLWEB, su software de gestión de pruebas que permite al personal de mando y de despacho ver la ubicación del agente en un mapa, junto con la ubicación del disparo y de cualquier otro agente dentro de la zona de alerta. El software permite la transmisión en directo de todas las secuencias de vídeo conectadas en una interfaz basada en web, de modo que el mando táctico puede obtener una visión en tiempo real de la situación.
Además de aumentar la seguridad de los agentes gracias a la mejora del conocimiento de la situación y las alertas, la detección de disparos de BodyWorn garantiza que los departamentos puedan acceder al vídeo, almacenarlo, protegerlo y compartirlo cuando sea necesario.
"Al activarse el disparo, el vídeo resultante se sella", explica Chris Lindenau, director de ingresos de Utility, que dirigió la demostración. "Se transmite automáticamente a un entorno en la nube compatible con CJIS, donde los administradores pueden acceder a él. El vídeo es seguro y se preserva la cadena de custodia".
Fuente: PoliceOne